Las zonas rurales y provincias de China se vieron afectadas principalmente por las medidas del gobierno comunista luego de congelar las cuentas bancarias de los afiliados desde hace ya tres meses, lo que se tradujo en masivas protestas y medidas represivas por parte del estado.
Conmoción y malestar expresaron los habitantes del país mas grande del lejano Oriente el pasado domingo 10 de de julio al ver bloqueadas sus cuentas bancarias en cuatro grandes bancos estatales, el Banco del Pueblo de Yuzhou Xin Min Sheng, el Banco del Condado de Shangai Huimin, el Banco de la Comunidad de Zhecheng Huanghuai y el Nuevo Banco del país Oriental de Kaifeng, aproximadamente medio millo de ahorrantes no ha podido retirar un solo Yuan. Medios internacionales y económicos del mundo entero ya lo bautizaron como un «corralito chino» sumiendo al país en una catastrófica crisis de escándalos financieros que reaparecen luego de décadas.
La problemática tomo una mayor relevancia hace unas semanas por las brutales medidas represivas tomadas por el gobierno contra decenas de manifestantes quienes expresaron su malestar afuera de una cede del Banco Popular de China de la provincia de Henan, pero el tema de fondo tendría una data desde abril, comenzando la primera protesta el 23 de mayo. Siendo la segunda economía mas grande del mundo desde finales de la década de los noventas y al consolidarse en la Organización Mundial de Comercio en 2001, todo pareciera derrumbarse al contrastarse con la amenaza a las inversiones internacionales que representa China con sus inestabilidades monetarias, mostrando su peor desempeño en los últimos dos años desde el comienzo del brote de coronavirus en Wuhan.
Según el reporte oficial, el altercado no se trataría mas que de una «actualización de sistemas internos», reteniendo cifras cercanas a US$1.500 y US$5.800 (entre $1.500.000 a $6.000.000 pesos chilenos). Analistas e intelectuales coinciden en que esto pudiera significar el comienzo de una crisis que podría derivar en una probable recesión a la hermética economía china dentro de las próximas décadas (efecto que significaría por ende un colapso en los bancos internacionales).